AMA A TU PRÓJIMO: Buen trato hacia la niñez

junio 17, 2009


Qué es la campaña

Introducción

El presente documento constituye una guía básica para todas aquellas personas u organizaciones que deseen implementar la campaña regional Ama a tu Prójimo: Buen trato a la Niñez.

Aquí se brindan una serie de pautas para su aplicación, tanto en el ámbito regional como nacional, a través de principios generales que le darán una luz para ponerla en práctica.

No obstante, cada ente implementador de la campaña (grupal o individual) está en el deber de seguir dichas pautas, tratando de respetar la esencia de las mismas, pero con la libertad de poder aplicarlas acorde con su propio contexto, necesidades y posibilidades.

Antecedentes

Esta campaña surge dentro del marco del IV Encuentro Latinoamericano y Caribeño de Niñez e Iglesia organizado por el Movimiento Cristiano Juntos por la Niñez (MJPN) en diciembre del año 2006 en Colombia.

En dicha ocasión el enfoque del evento fue “Violencia contra la Niñez” y los participantes asumieron el compromiso de trabajar en acciones concretas para contrarrestar la creciente ola de violencia, pero sobretodo, para trabajar a favor de la promoción del buen trato hacia las personas menores de edad…

El Dios niño

junio 02, 2009

Por Alexander Cabezas*
Red Viva






Sin duda alguna cuando escuchamos el término: “El Dios niño”, viene a nuestro imaginario aquellos pasajes bíblicos en Mateo o Lucas; alusivos a la infancia del Señor Jesús en un pesebre. Pero ¿Podríamos tratar de ver a Dios con actitudes semejantes a las de un niño o niña? O, es ¿algo que nos escandaliza?

Muy contrario cuando pensamos en Dios como el Padre, el Sanador, el Pastor, la Puerta, la Roca, entre otros. Pero entonces ¿Por qué nos cuesta pensar en él como “el Dios niño”?


- ¡No puedo imaginarme a un Jesús sonriendo! decía una señora.

- ¡Cada vez que pienso en Dios, me da miedo, pues lo imagino acusándome!, aseguraba un joven.


Declaraciones como éstas reflejan una comprensión desfigurada, por supuesto, pero en gran medida es lo que hemos comprado o vendido por generaciones y se han encargado de mostrar una cara de un Dios serio, aburrido, acusador, atemorizante, u otra peculiaridades, por cierto, más presentes en muchos de nosotros los adultos, que en Dios mismo.

Quizás es por ello que me atrevo a decir que Dios nos permite capturar su esencia en diferentes escenas cuando le vemos:


Tirando piedras como los niños y las niñas (Josué 10:11).

Jugando a las luchitas (Génesis 32: 24).

A las “escondidillas” (Éxodo 33:23).

No teme “jugar con barro” con tal de esculpir luz a un ciego (Juan 9:6).

Es el “Dios juguetón”, como algunos se han atrevido a llamarle, quien confunde lógica de los sabios y entendidos (1 Corintios 1.19).

Sabe atrapar los misterios insondables del Reino, para soltaros en sencillas, pero profundas palabras transformadoras que llamó: Parábolas.

Es el mismo que irrumpe la eternidad; desciende desde los cielos y, al siguiente momento le encontramos en la sonrisa encantadora de ¡un bebé envuelto en pañales!

¿Querrá este Dios niño también jugar con nosotros? Quizás; siempre y cuando estemos dispuestos a no envejecer en nuestro espíritu. Cuando estemos dispuestos a presentarlo joven, fresco y dinámico, a él y a sus palabras. Cuando logremos mostrar un rostro divino más cercano, más accesible, y por ende, un evangelio más humano capaz de volver a llamar a aquel hombre o mujer, niño y niña, que vagando entre la multitud, entre lágrimas dejó su camino.


Será entonces cuando comenzaremos a conocer al “Dios niño” que, espera que nosotros también nos hagamos como él, y tomemos sus llaves con el fin de entrar a su jardín, que dulcemente llamó: Reino (Mateo 18:3).



*Alexander Cabezas es Coordinador de Relaciones Eclesiásticas de Viva de América Latina y el Caribe, Enero 2009